Entrevista a Laura Marrone, pedagoga y
legisladora electa de la CABA (FIT)
El gobierno pretende reestructurar el sistema educativo reemplazando docentes por programas digitales
Mario Hernandez
M.H.: Me sorprendió la importancia que le da Clarín a una encuesta realizada en la
última semana de octubre que señala que el 75% de la sociedad cree que el
sistema educativo no está funcionando bien, responsabilizando a las políticas
públicas y a la falta de capacitación docente. Me llamó la atención porque le
dedica ¾ parte de una página y más chiquitito, debajo de la misma, dice que de
todas maneras esta no es la principal preocupación de la gente, sino que es la
inseguridad, luego la pobreza, la inflación, la desocupación, la suba de
tarifas, el narcotráfico y, sin embargo, centra los cañones en el sistema
educativo. ¿Tenés alguna opinión al respecto?
L.M.: Sí, tengo la nota en mis manos. Cuando hicimos
la última entrevista yo te hablaba de la importancia de la fuente, la de esta
encuesta es de una consultora que se llama Management
and Fit, una consultora que, por lo que investigué, no tiene historia, no
se sabe cuándo empezó a funcionar, pero se dedica a brindarle a las empresas
informes sobre personal que podría ser tomado para cuestiones laborales, hacen
una especie de filtro. Sus integrantes son personas que no tienen nada que ver
con la educación, sí con la estadística y el management.
Es muy poco seria esta
encuesta, porque incluso como diagnóstico está dicho para estigmatizar al
sistema educativo y justificar una reforma. Es una campaña que está haciendo Clarín, también La Nación y van en consonancia con el Ministerio de Educación
nacional que, como dijo Esteban Bullrich, pretende “revolucionar la educación
en la Argentina”. Una revolución que más vale que no se haga porque va a
arrasar el sistema educativo. La intención es reestructurar todo a partir del
trabajo desde las tecnologías digitales, pensando en un reemplazo creciente de
los docentes por programas administrados por la web.
Nuestro sistema de evaluación está pensado a
partir de las propias instituciones no de consultoras privadas
M.H.: Eso se está implementando en este momento en
España. Se ha metido Google y otra empresa informática que no recuerdo el
nombre.
L.M.: Ellos definen al docente como un curador, como
el de un Museo, que lo que tiene que hacer es preparar el material para que los
chicos se auto administren las pruebas que están en los paquetes digitalizados
en internet y que se compran a empresas.
Hay un proceso
combinado, durante la época de Menem hubo un operativo para justificar la
privatización de las empresas de servicios públicos a través de desacreditarlas
en forma creciente por los medios de comunicación junto con periodistas como
Neustadt o Grondona, que en aquel entonces se encargaban de esto. Eso es lo que
están haciendo ahora con la educación, por eso Clarín sacó esta nota, otra la semana pasada, La Nación hizo lo mismo, etc.
Escribí una nota sobre
Lanata, que también está en esta línea, se llama “No está bien hablar de lo que
no se conoce”, porque con toda impunidad pretende desacreditar el trabajo
docente diciendo que no queremos ser evaluados, lo cual es falso, porque
nosotros tenemos sistemas de evaluación, hacia los alumnos en forma sistemática,
durante todo el año, y de nosotros mismos por los cuerpos directivos o por los
cuerpos de inspectores y supervisores.
El sistema de
evaluación que tenemos está pensado en forma situada, a partir de las propias
instituciones que tienen que ver con el proceso educativo. En esta consultora
sus integrantes están formados en dirección de empresas, magister en gerencia y
servicios de salud y embajador para asuntos especiales en Europa y EE. UU., o
sea, que de educación no saben nada y, por lo tanto, hacen un trabajo sumamente
superficial.
Se está montando una ingeniería de
recolonización ideológica
M.H.: También han participado en la inscripción
online. En Tiempo Argentino
mencionan que la empresa Sintagma resultó beneficiada con el desarrollo del
software y su implementación, aunque arrancó con errores básicos como la falta
de opciones para quienes tenían prioridad. Lo llamativo, dice, es que el
Ministerio vuelve a llamar a licitación y siempre Sintagma resulta favorecida,
junto a otra firma FDV Solutions S.A. Parece ser toda una línea de trabajo.
L.M.: Yo creo que esta es una línea de debate que
tenemos que sostener, porque se está montando una ingeniería de recolonización
ideológica a través de la educación de nuestra juventud mediante estas empresas,
bajo el formato de consultoras y ONG, pero que son todas filiales de empresas
estadounidenses centralmente, que importan recetas pero también importan todo
un recorte del currículum de lo que a ellos les interesa. Por ejemplo, esta
semana se aprobó en la Legislatura el pase a recinto de una declaración que
presentó una asociación privada para que promueva, salude y recomiende el uso
de paquetes de programas para trabajar en las escuelas el tema de desórdenes
alimenticios que son hechos en empresas norteamericanas que harían una
adaptación a nuestra particularidad regional. Como si no tuviéramos
profesionales que encaran estos problemas y que generan estrategias de trabajo,
paquetes de recursos didácticos en lo que se llama educación para la salud
dentro de las escuelas. Hay una invasión dentro de la escuela pública de este
tipo de asociaciones.
Recientemente se
sancionó en el Congreso nacional una Ley sobre dislexia, es gravísimo porque el
concepto de la dislexia como una tipificación de origen neurológico de lo que
pueden ser problemas de aprendizaje en la lecto-escritura, inclusive hasta en
el habla por parte de niños, está cruzado por una trama de problemas que no
tienen un origen necesariamente neurológico, sino que están entramados con un
contexto social, histórico, emocional que requiere no la patologización de
nuestra infancia y, por lo tanto, la derivación a tratamientos
neuropsiquiátricos o medicalizantes, sino un enfoque que se hace desde la
psicopedagogía, de la misma educación con un proceso paulatino donde se va
logrando que esos chicos aprendan a leer, escribir y expresarse sin errores.
Esta invasión de
empresas y enfoques biologicistas anula los problemas sociales. Lo que se
deriva de esta Ley de dislexia es que a los docentes nos van a llevar al Instituto
de Facundo Manes para capacitarnos y poder detectar los problemas de la
dislexia y transferirlos a tratamientos neurológicos y psiquiátricos.
M.H.: Todo esto combinado con la medicalización de
los niños.
L.M.: Así es. EE. UU. tiene un porcentaje muy alto
de alumnado medicamentado y con serias consecuencias porque esos niños se
vuelven adictos, si desde la primera infancia les están dando psicofármacos
imaginate lo que pasa si se los querés sacar a los 13/14 años. Es un problema
gravísimo. En este momento hay un alerta muy grande de los psicólogos e incluso
de los psiquiatras para revisar esta situación. Pero todo lo que en EE. UU. se
está revisando y reevaluando, el PRO lo compra como la novedad.
M.H.: Sin embargo, hay cuestiones básicas que no se
resuelven. Una Supervisora del Distrito escolar 19 se hizo presente en la
Legislatura para reclamar por la falta de vacantes.
L.M.: Felicito a esa supervisora que fue capaz de
presentarse en la Legislatura para poner sobre la mesa lo que nosotros desde el
Frente de Izquierda y de Ios Trabajadores (FIT) estamos planteando desde hace 3
años y este año que viene se va a agravar muchísimo, ya tengo contabilizados
700 pibes que no van a tener vacante en primer grado solamente en 4 distritos,
proyectá eso sobre toda la Ciudad de Buenos Aires.
Después hablamos de
inclusión, mientras los chicos se quedan sin ir a primer grado cuando la edad
les corresponde. Gladis, que es la supervisora que habla en ese video que está
siendo viralizado, señala que hubo chicos que ingresaron a la escuela recién en
agosto y muchos otros directamente ni ingresaron.
M.H.: Hay una nota de Tiempo Argentino que señala que desde que se instauró el sistema de
inscripción online hace 3 años, las autoridades reconocieron al menos que
23.432 chicos se quedaron sin vacantes.
L.M.: Eso es así. Este año como FIT pedimos un
informe que nos entregaron en mayo más o menos, porque el Ejecutivo está
obligado a responde, y no sabemos si es exacto; mucha gente se fue a inscribir
en octubre, noviembre, diciembre, febrero y marzo y no consiguió vacante y bajó
los brazos, porque tiene que volver a trabajar. Entonces, lo que quedó como
demanda insatisfecha fue esa cifra este año, unos 10.000 para nivel inicial,
otros 500 en primaria y otros 400 para nivel medio.
Ese fue el paquete que
el PRO reconoció en Legislatura en mayo, no sabemos si es así realmente, porque
tengo constancia habiéndome parado en una esquina para juntar firmas en un
barrio de zona sur y encontrarme en una hora con 20 pibes sin vacante.
El problema fue grave
este año y lo va a ser también el próximo, siguen creciendo las villas, hubo un
debate por la urbanización de la Villa 20 que fue muy emocionante porque las
familias lograron caminar hacia la urbanización. Pero estamos hablando de un
plan en etapas de alrededor de 2.500 viviendas con una sola escuela, cuando el Distrito
21, que es la zona de Lugano y Villa 20 es uno de los distritos que viene
sosteniendo una falta de vacantes gravísima desde hace 6 años. Se les ofrece un
micro para llevarlos a la escuela en Zona norte con 3 horas de traslado diario y
se desgranan, porque terminan no yendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario